Domingo de la Anunciación a Zacarías - Homilía del Patriarca Rai.
- Noticias Maronitas
- 14 nov 2021
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Actualizado: 16 nov 2021

DOMINGO DE LA ANUNCIACIÓN A ZACARÍAS
V JORNADA MUNDIAL DE LOS POBRES.
Homilía de Su Beatitud Bechara Pedro cardenal Rai
Patriarca de Antioquía y de todo Oriente
Domingo de la Anunciación a Zacaría
V Jornada Mundial de los Pobres
Bkerke - 14 de Noviembre de 2021.
"Y llamarás su nombre Juan” (Lucas 1,13).
1.- En este domingo, la Iglesia celebra dos fiestas: la primera es litúrgica, que es el recuerdo de la Anunciación a Zacarías, en que Dios respondió a su oración, y que Dios lo bendecirá con un hijo, a pesar de su avanzada edad, y a su esposa Isabel que es estéril y le ordena "llamarlo Juan" (Lucas 1, 6-7 y 13).), porque revela la misericordia de Dios. La segunda fiesta es eclesiástica, que es la celebración del V Jornada Mundial de los Pobres, que en esta ocasión, Su Santidad el Papa Francisco dirigió un mensaje cuyo tema es la palabra del Señor Jesús: «A los pobres los tienen siempre con ustedes» (Marcos 14, 7).
Esta segunda celebración es conmemorada por la Asociación Caritas Líbano y varias de las familias más necesitadas están invitadas a ella, y la asociación las llama "la familia Caritas". Quisiera saludar a su presidente, el querido padre Michel Abboud Al-Karmali, a la junta directiva y a todos sus asistentes en la Caritas central, y en las 36 provincias y centros repartidos por todo el territorio libanés y a sus 1,200 jóvenes voluntarios. Con esta iniciativa, Caritas Líbano celebra el "Jornada Mundial de los Pobres" con oración, reflexión y acción. El servicio amoroso a los hermanos necesitados lo lleva a cabo Caritas Líbano a diario con sus diversos programas: social, sanitario, educativo, de desarrollo, educativo, familiar, juvenil, trabajadores extranjeros y ayuda financiera, en especie y hospitalaria, con sus ramificaciones. Ayer vimos su contenido detallado en la Asamblea General de la Asociación. Se sabe que Caritas es el órgano oficial de la Iglesia al servicio del amor social en el Líbano.
2.- El regalo de Dios a Zacarías e Isabel es el fruto de su fidelidad a Dios y sus oraciones. Ambos eran muy avanzados en edad y no habían tenido hijos, merecían este privilegio divino: tener un hijo que les naciería y lo llamarían “Juan” para indicar que Dios es misericordioso, bastante rico en misericordia, y su misericordia que se ha manifestado en ellos y que abarca a toda la humanidad, como indica la palabra hebrea “Yahu Hanan”. Se merecían este privilegio porque “eran justos ante Dios, anduvieron irreprensibles en todos sus mandamientos y ordenanzas” (Lucas 1, 6); Y porque Juan, como el Señor Jesús dice de él, es: “mayor que un profeta” (Lucas 7, 26), y el Espíritu Santo selló con él la palabra por medio de los profetas. El fuego del Espíritu Santo habita en él, y camina en él, como precursor de la venida del Señor, preparando su camino y su pueblo (Lucas 1, 15-17); porque él es la voz del Consolador que viene” (Juan 1, 23), un testimonio de la verdadera luz que viene al mundo y que iluminará a toda persona (Juan 1, 8-9).
Es verdaderamente el amanecer que anuncia de la venida del sol, Jesucristo, Salvador del mundo y Redentor del hombre.
3.- La oración es la clave de los dones de Dios y se caracteriza por tres cosas:
a).- La oración es posible y permanente, en la Iglesia, en casa, en el trabajo, en el camino, mientras se espera. Esto significa que el tiempo, según el cristiano, es el tiempo de Cristo resucitado, que “está con nosotros todos los días” (Mateo 28, 20), sean cuales sean las tormentas, porque él las puede calmar (cf. Lucas 8, 24). Nuestro tiempo está en manos de Dios.
b).- La oración es una necesidad de la vida, porque nos pone bajo la guía del Espíritu Santo, que no puede estar en nuestras vidas si nuestro corazón está lejos de Él, San Juan Crisóstomo afirma: "Nada es más importante que la oración. Hace posible lo que no es posible, fácil lo difícil. Una persona que ora no vive en estado de pecado".
c).- La oración es inseparable de la vida cristiana, porque las dos parten del mismo amor y del mismo desapego que brota del amor como fuente. Este vínculo fue demostrado por el Señor Jesús al decir: "El Padre les dará todo lo que le pidamos en mi nombre" (Juan 15,16).
4.- Su Santidad dice en su mensaje para la Jornada Mundial de los Pobres, a partir de la palabra del Señor Jesús: «A los pobres los tienen siempre con ustedes» (Marcos 14, 7): “Es una llamada a no perder nunca vista de la oportunidad de hacer el bien y la palabra del Señor nos trae de regreso a la palabra. "Lo divino en la Santa Biblia:" Si tienes un pobre entre tus hermanos [...], no endurezcas tu corazón y no apartes tu mano de él, sino ábrele la tuya y dale todo lo que deba. [...] Dámelo, sin coacción, y así el Señor tu Dios te bendecirá en todas tus obras y en todas tus empresas. La tierra no está sin los pobres ”(Deuteronomio 15, 7-8. 10-11) el Apóstol San Pablo enfatizó que Dios ama al que da gozo” (2 Corintios 9, 7). No se trata de limpiar nuestra conciencia dando alguna limosna, sino que hay que oponerse a la cultura de la indiferencia y la injusticia con la que tratamos a los pobres.
San Juan Crisóstomo dice: "El que es generoso no debe pedir una declaración sobre la vida de una persona necesitada, sino que solo debe curar su pobreza y satisfacer sus necesidades. Todo ser humano pobre pide una cosa, y esa es la satisfacción de su necesidad y su condición de indigente. Quien da limosna es puerto para los necesitados: el puerto recibe a todos cuyo barco se ha hundido y los libra del peligro, sean malos o buenos, sea cual sea la situación de los que están en peligro, él les da refugio y protección. Así que tú, cuando veas en la tierra a esa persona cuyo barco naufragó por la pobreza, no lo juzgues, ni pidas saber la historia de su vida, sino que lo liberes de su terrible experiencia. ”(Serie de homilías sobre la parábola de los ricos y Lázaro, segunda homilía, párrafo 5).
5. Servir a los pobres es misión de la Iglesia, de su clero y de su pueblo. Su misión se basa en tres servicios interrelacionados y complementarios:
a).- El ministerio de la Palabra (kerygma) a través de la evangelización y la enseñanza, que genera e ilumina la fe.
b).- El servicio de la gracia para la santificación mediante la distribución de los sacramentos (liturgia) que santifican al creyente.
c).- El servicio del amor social a los pobres (diaconía), que los saca de su miseria.
6. Es verdaderamente lamentable que algunos funcionarios políticos y quienes participan en la labor política, en lugar de luchar contra la pobreza a través de diversos medios políticos, legislativos y de procedimiento, estén cultivando el empobrecimiento de los ciudadanos en la mayor cantidad, la mayor cantidad de privaciones y desempleo, y la mayor cantidad son la evidencia más contundente. Además de eso, son reacios a lidiar con la aguda crisis que estalla en los estados del Golfo. El agotamiento del tiempo nos lleva a una crisis económica y viva que dificulta su solución, lo que perjudica los intereses de cientos de miles de libaneses y los intereses de comerciantes, industriales, agricultores y otros sectores libaneses.
Resolver esta crisis con valentía nacional no afecta la dignidad del Líbano. Más bien, exponer a los libaneses a la expulsión, el desempleo, la pobreza, la indigencia y el aislamiento árabe es lo que afecta la dignidad, la soberanía y la violencia. La subida del precio del dólar a tal punto que la ciudadanía no puede adquirir los artículos de primera necesidad, sobre todo en vísperas de las próximas vacaciones, es lo que daña la dignidad y humilla a las personas. La dignidad no está ligada a la terquedad, sino a la sabiduría y a las buenas relaciones con todos los países, especialmente con los estados hermanos del Golfo, porque su papel hacia el Líbano fue positivo, unificador y pacífico, no negativo, divisivo y militar.
Ningún partido tiene derecho a imponer su voluntad a todos los libaneses, atacar las relaciones del Líbano con el mundo, interrumpir el trabajo del gobierno, paralizar el papel del poder judicial y crear una atmósfera de amenaza e intimidación en la sociedad libanesa. Por otro lado, los oficiales, todos los oficiales, no tienen derecho a ver todo esto y buscar la aprobación de este grupo y de aquel. Esta es la pérdida de la dignidad y esta es la humillación misma.
7. ¿Entonces alguna lógica que permita congelar el trabajo del gobierno, las reformas y negociaciones internacionales en estas circunstancias? Todo lo que está sucediendo hoy contradice el sistema libanés en su aspecto constitucional, pacto y democrático.
La abrumadora mayoría del pueblo libanés quiere salir de la atmósfera de guerra, lucha y conflicto, entrar en un mundo de paz, encuentros civilizatorios amplios y duraderos. ¿Qué tenemos con las guerras de la región y sus ejes? ¿Qué tenemos con sus luchas y el juego de sus sistemas? ¿Cuál es nuestro negocio al decidir el destino de otros pueblos cuando no podemos decidir nuestro propio destino, sino más bien tomar una decisión administrativa?
Si algunos consideran que la neutralidad es una solución difícil, entonces la vemos como la única solución para salvar al Líbano. Se ha vuelto imposible salvar la asociación nacional sin imparcialidad y cuanto más demoremos la adopción de este sistema, más se dañará esta asociación y el Líbano entrará en laberintos constitucionales, cuyo alcance ningún partido puede determinar.
8. Oremos a Dios para que nos haga consientes del valor y de los frutos de la oración, como nos revela el ejemplo de Zacarías e Isabel, para que nos demos cuenta de que Dios está cumpliendo su designio en la salvación de la humanidad en cooperación con cada ser humano, pidiendo a él nos revele el papel de todos y cada uno de nosotros a través de la situación en la que se encuentra. Nuestra vida se convierte en oración de alabanza, acción de gracias y glorificación de Dios, Padre, Hijo y Espíritu Santo, ahora y siempre, Amén.
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