Cuarto Domingo de Pentecostés - Homilía del Patriarca Rai.

CUARTO DOMINGO DEL GLORIOSO

PENTECOSTÉS.

Homilía de Patriarca Maronita,

Su Beatitud Bechara Pedro cardenal Rai.

4° Domingo del Glorioso Pentecostés

Domingo del gozo de Jesús en el Espíritu Santo

Bkerke - 13 de junio de 2021

"Jesús se regocijó en el Espíritu Santo y oró" (Lucas 10, 21).

1. Cuando una persona abre su corazón al Espíritu Santo, se regocija y ora, porque el Espíritu Santo es maestro y fuente de oración en todas las circunstancias de nuestra vida, tanto las dulces como las amargas. Porque, de acuerdo con lo que dice el apóstol Pablo, “Él viene en ayuda de nuestra debilidad, porque no oramos debidamente como deberíamos, pero el Espíritu intercede por nosotros con gemidos indecibles” (Romanos 8, 26). Y mientras nos enseña la oración, consuela nuestros corazones en el dolor, los guía en la pérdida y los abre en su felicidad a los pobres, necesitados y oprimidos.

Cuando los discípulos de Jesús regresaron, regocijados por el éxito de su misión, “Jesús se regocijó en el Espíritu Santo y oró con gracias y glorificación: te doy gracias, Padre, Señor del cielo y de la tierra” (Lucas 10:21).

2. Mientras celebramos juntos esta divina liturgia, le pedimos a Dios el don del Espíritu Santo para que nos enseñe la oración y, en particular, cómo volver a Dios para leer mejor los signos de los tiempos en nuestra vida y en el eventos que nos conciernen personalmente. No son solo eventos dulces o amargos, sino ocasiones para escuchar lo que Dios nos dicta a través de la inspiración del Espíritu Santo. “Todo conduce al bien de los que temen a Dios”, dice el apóstol Pablo (Romanos 8, 28).

3. La familia del joven Ryan Luke Wehbe, de quien nos despedimos con mucha tristeza y oración hace tres semanas, se une a nosotros en la Santo Misa. Extendemos nuestro más sentido pésame a sus padres, dos hermanos, abuela, dos tíos, dos tías y sus familiares. Le pedimos a Dios su descanso eterno en el cielo y que tengan su familia el consuelo divino.

4. Dirijo un saludo especial a los representantes de la Universidad Basiliana, fundada hace setenta y cinco años. Saludo a su alcalde central: su decano y miembros. Felicito sus objetivos, que son la cooperación entre la familia y sus descendientes, su solidaridad y la preocupación por sus hijos en lo que conduce a su bienestar material y moral. Han tomado a su patrón San Basilio y celebra una Misa en junio como aniversario de su fundación, además de un ejercicio espiritual en Navidad o Semana Santa, y cuenta con un sacerdote que guía a los miembros de la familia. Que Dios bendiga sus obras, sus miembros y sus familias.

5. Volviendo al tema de la oración en el Evangelio de hoy, aprendemos que la oración es el recuerdo de Dios: recordamos que Él nos dio la existencia. Recordamos sus obras, su protección por nosotros y su plan de salvación para todos nosotros. Por eso oramos por la mañana, al mediodía y por la noche. Oramos antes y después de la comida. Oramos cuando nos acostamos y cuando nos despertamos. En cuanto a la culminación de la oración del domingo, que es el encuentro sacramental vivificante con el amor del Padre que nos da sombra, la gracia del Hijo que nos salva y la morada del Espíritu Santo que nos santifica con los frutos de la vida y redención.

Toda oración, ya sea verbal o contemplativa, requiere que seamos humildes e invoquemos a Dios.

6. Derivamos la oración de sus manantiales: de la palabra de Dios que al escucharla aprendemos a rezar como una respuesta de Dios que nos hablado; De la fe que nos lleva a buscar a Dios a través de la oración; De la esperanza que hace que nuestras oraciones esperen las manifestaciones de Dios; Del amor que nos impulsa a perseverar en él, por amor a Dios.

7. Dios responde nuestras oraciones sin importar lo que expresamos. Aceptó la oración de la humildad del corazón de aquel publicano en el templo, la oración de fe del leproso, el cananeo y Jairo, la oración silenciosa de los cuatro hombres que le llevaron el paralítico de Capernaum, y a la mujer hemorroísa, y la oración urgente del ciego : "Oh, hijo de David, ten piedad de mí".

8. Cuán necesario es que cada funcionario ore por su salvación personal, gobierne con justicia y con devoción para asegurar el bien común, que es el bien de todo ciudadano y de todos los ciudadanos. El funcionario que ora teme el juicio de Dios, pero el que no cree y no ora, teme el juicio del pueblo. Les decimos a los funcionarios que obstaculizan la formación del gobierno y el progreso del Estado: Hemos conocido la política de tierra quemada, pero hoy en día vemos la política del pueblo quemado. El mundo entero nos está esperando para podernos ayudar en el resurgimiento del estado. En cuanto a ustedes, están sumergidos en un juego infernal, en el egoísmo y los errores, en los errores de cálculo y en la mala gobernanza, en las cuotas y beneficios, y en ir en el camino contrario de las aspiraciones de nuestro pueblo...

No es suficiente con admitir su incapacidad y las debilidades de sus poderes para justificar el estancamiento, dejar que las crisis se intensifiquen, las tragedias se intensifiquen y se acelere el colapso. Este país no es propiedad privada para permitirles arruinarlo y destruirlo. Este país es propiedad de su gente, su historia y sus generaciones futuras. Ante la falta de abordar los problemas generales de la vida, nos preguntamos si se les ha asignado la destruir nuestro país, de lo contrario ¿Por qué este estancamiento en las oportunidades de tratamiento disponibles, cuando estamos en un momento en que todo está resuelto?.

9. Hacemos un llamado al estado para que se avance hacia países hermanos y amigos y negocie con ellos para ayudar al Líbano hoy antes de mañana. La gente no puede soportar más opresión y humillación. Los países están dispuestos a responder al llamado, pero asumen que el estado será el estado del Líbano y el estado del pueblo del Líbano, y su legitimidad posee su decisión libre e independiente. Ha llegado el momento de que el Estado salga del juego de los ejes regionales y reconsidere sus decisiones, cuyos desarrollos han demostrado que no benefician al país, la independencia, la estabilidad, la unidad y la prosperidad, que han destruido las relaciones del Líbano con los países árabes e internacionales. Este grupo político ha afectado la reputación internacional del Líbano, mientras que el nombre de Líbano era un símbolo de creatividad, renacimiento y prosperidad en los países árabes y en el mundo.

Hacemos un llamado al gobierno interino para que cumpla con sus deberes en virtud de la Constitución, la ley y la conciencia, tome la iniciativa de proporcionar alimentos, medicinas, combustible y leche a los niños. ¿No es el más simple que sus deberes revisar depósitos y almacenes monopolistas, detener las redes de contrabando organizadas e incubadas, el cierre de los cruces ilegales y controlar los cruces legales, el cierre de las tiendas, prevenir los altos precios y la falsificación?.

10. A pesar de la gravedad de la crisis, existen soluciones y medios de rescate disponibles, pero hay quienes impiden la implementación de las soluciones así como la formación del gobierno. Hay quienes quieren cerrar el país y recibir sus llaves. Estas son apuestas equivocadas. Este es un país que no entrega sus riquezas a nadie y no se rinde ante nadie. La llama de la lucha está viva en los corazones de nuestro país, a pesar del colapso, posee todas las energías de la salvación, pero necesita un liderazgo sabio, valiente y patriótico que ame a su gente. Si este liderazgo no está disponible, es responsabilidad del pueblo organizarse en un movimiento de protesta pacífica para lograr el cambio requerido y restablecer la identidad del Líbano, su neutralidad activa, su lugar en el sistema de naciones, sus amistades en el mundo global, su ciclo económico y civil, su papel en la creatividad y la paz.

11. Oremos por la salvación del Líbano y su pueblo. La oración con fe y la esperanza de corazón no es rechazada. En todo caso, elevemos oraciones de agradecimiento y alabanza a la Santísima Trinidad, al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, ahora y siempre, Amén.