Arzobispo Maronita les dice a los cristianos desplazados: su hogar está aquí, sus raíces están aquí

Este miércoles en Damasco, se iniciaron los trabajos de una conferencia internacional organizada por Rusia con el objetivo de debatir el regreso de los sirios desplazados que abandonaron el país para escapar de la guerra civil que estalló en Siria hace más de nueve años, fuentes eclesiásticas en Alepo indicaron que el número de cristianos desplazados que regresaron a sus hogares es muy reducido. En un momento en el que los ciudadanos sirios sufren escasez de alimentos y falta de suministro eléctrico.

Las estadísticas indican que desde mediados de 2011, fecha del estallido de los enfrentamientos tras las manifestaciones populares contra el régimen del presidente Bashar Al-Assad, casi la mitad de los ciudadanos abandonaron sus hogares para escapar de la guerra, de los actos de violencia y destrucción, gran parte de ellos buscó refugio en países vecinos, especialmente Turquía, Jordania, Líbano e Irak. Otros a Europa, América del Norte, África y Asia. La conferencia internacional, que inició sus trabajos en Damasco miércoles y finalizó este jueves, está dedicada a discutir el expediente de los refugiados sirios que se encuentran actualmente fuera del país.

Naciones Unidas participa en la conferencia internacional como "observador", mientras que Estados Unidos, Europa y Turquía no participaron. La asistencia se limitó a Rusia, Irán, China y varios países que restablecieron sus relaciones diplomáticas con Damasco después de años de tensión, como Emiratos Árabes Unidos, Omán y el Líbano. La Unión Europea emitió una declaración confirmando que la prioridad hoy es crear las condiciones propicias para el retorno seguro, voluntario, honorable y sostenible de los refugiados sirios y los desplazados internos, de conformidad con el derecho internacional y las normas de protección de los refugiados. Bruselas consideró la conferencia prematura.

Para la ocasión, el sitio web Vatican News realizó una entrevista con el arzobispo de Alepo para los maronitas, el arzobispo Youssef Tobji, quien habló sobre el regreso de los cristianos desplazados a sus hogares, indicando que las necesidades de los residentes siguen siendo muchas a pesar de los incansables esfuerzos realizados y la ayuda mutua entre muchas familias. En cuanto al regreso de los cristianos sirios que se encuentran fuera del país, Su Excelencia señaló que este proceso aún no ha tenido lugar y lo mismo se aplica a los musulmanes.

En respuesta a una pregunta sobre las condiciones que deben darse para permitir el regreso de estas personas, Monseñor Tobji dijo que el gobierno ha brindado algunas facilidades, ya sea a nivel práctico o legislativo, sobre todo para dar cabida al regreso de los desplazados, y dijo que tenía grandes esperanzas al respecto, pero no sabía qué, si este proceso sería fácil, especialmente porque aún no ha comenzado. En cuanto a los desplazados internos, Mons. Tobji también dijo, que el grueso de estas personas han regresado a sus ciudades y pueblos, pero hoy carecen de viviendas, carreteras y edificios, esto es muy difícil, a pesar de la solidaridad existente entre muchas familias. Señaló que muchas familias han dado cobijo a familias que perdieron sus hogares, pretendiendo iniciar el proceso de reconstrucción y que es un asunto relacionado con las sanciones impuestas a Siria.

En el contexto de su charla sobre las condiciones de vida de los ciudadanos, el arzobispo maronita de Alepo aseguró que la gente sufre de hambre. Esta situación se agrava debido a las sanciones internacionales, resultado de la migración de capitales y la pérdida de oportunidades laborales, agregó que la condición de estas personas es peor hoy que durante el bombardeo, destacando que el hambre que afecta a los ciudadanos sirios también equivale a una guerra que destruye a toda la población. Para concluir, Su Excelencia deseaba que la guerra se detuviera y se levantaran las sanciones, se dirigió a los cristianos desplazados y les dijo: "Su hogar está aquí y sus raíces están aquí". 

Fuente Vatican News.